En la imagen original, es decir, la primera imagen, percibimos una gama de colores de grises, negros y violetas en distintas tonalidades, incluso en la parte de izquierda, en la esquina inferior, hay un azul apagado por la ausencia de nubes en ese pequeño espacio. Es casi una fotografía en blanco en negro si no fuese por los violetas y esa pequeña mancha azul. La imagen transmite melancolía y tristeza o incluso enfado, por esa gran mancha negra que aparece en la esquina inferior derecha.
En esta nueva imagen hemos manipulado la saturación de la anterior, ahora vemos colores más vivos y pastelosos, encontramos distintos azules, lilas y un amarillo verdoso de fondo que hace que resalten los demás colores, aunque la mancha de la esquina derecha inferior no desaparece. Esta imagen transmite intensidad por los colores, hay partes más armoniosas y otras más desequilibradas, así puede haber contraste de emociones.
Ahora la fotografía ha sido manipulada de manera que se ha cambiado el tono. No hay muchas diferencias entre esta y la primera, puede parecer más iluminada y los colores cambian, el lila es sustituido por un rosa palo grisáceo. También puede haber sentimientos encontrados, melancolía y tristeza pero paz y tranquilidad a la vez.
Esta vez, hemos manipulado la iluminosidad de la imagen de manera que la hemos bajado. Ahora es mucho más oscura, con muchos negros y grises, podría llegar a parecer una foto en blanco y negro si no fuese por los matices lilaceos y esa parte pequeña de color azul a la izquierda que vendría a ser el cielo. Esta fotografía transmite enfado, pero no como la original, èsta transmite mucho enfado y es muy dramática.
